Se avisa a todos los visitantes y feligreses de nuestra parroquia que SE REQUIERE EL USO DE CUBIERTAS DE TELA O TAPABOCAS en todos los espacios públicos dentro de la iglesia y también en los espacios al aire libre, cuando no se pueda mantener una distancia de 6 pies con personas que no vivan dentro de la misma casa.
Para su conveniencia, contamos con mascarillas GRATUITAS, las cuales se encuentran disponibles en la entrada de la iglesia.
Les recordamos que deben desinfectar sus manos constantemente para así minimizar el contagio de enfermedades.
Normas Diocesanas para la celebración de Misas bajo techo
Recomendaciones para minimizar la transmisión del Coronavirus
Nuestro personal de limpieza está trabajando diligentemente entre los horarios de Misas, limpiando y rociando las áreas públicas para mantener nuestro espacio desinfectado y seguro. Ahora tenemos una nueva máquina de vapor que se utilizará durante la semana para aumentar la desinfección de nuestros espacios públicos.
¡Estamos siguiendo las mejores prácticas para mantener nuestra parroquia limpia, desinfectada y segura!
1 de diciembre de 2020: A partir del domingo, 6 de diciembre, nuestra Misa en español regresa al horario original de 2:30pm y se agrega una Misa en inglés los domingos, al medio día. Este horario será evaluado nuevamente en las próximas semanas y comunicaremos si se realiza algún cambio. ¡Gracias!
Aunque el Obispo Peter J. Jugis ha dispensado a las personas católicas de la Diócesis de Charlotte de su obligación de asistir a Misa durante la pandemia, es importante recalcar que debemos mantenernos unidos en oración, sobre todo los domingos.
Considere las siguientes recomendaciones para fomentar una rutina espiritual en casa:
Creo Señor mío que estás realmente presente en el Santísimo Sacramento del altar.
Te amo sobre todas las cosas y deseo ardientemente recibirte dentro de mi alma; pero, no pudiendo hacerlo ahora sacramentalmente, ven al menos espiritualmente a mi corazón.
Y como si te hubiese recibido, me abrazo y me uno completamente a Ti.
¡Oh Señor, no permitas que me separe nunca de Ti!